«¿Qué tan difícil puede ser remar 4 horas?», pensé. Pequeña ilusa. ¡Descubre las aventuras de Coni Fueyo en Valdivia!
Volví de un viaje a México donde me quedé en el que me dijeron, era el hotel con la mejor vista de Ciudad de México: el Grand Fiesta Chapultepec. Y era cierto.
Con autorización notarial en mano, ya estaba lista para cumplir mi sueño. Playa del Carmen, Isla Mujeres y Cancún nos esperaban.
Vivir con extraños que se convierten en tus compañeros de hogar es una de las más raras costumbres neozelandesas.
Esta es mi experiencia en el evento donde puedes fumar durante todo el día sin que nadie pueda decirte nada, ni siquiera la policía.
En Pichasca cumplí uno de mis sueños más esperados: viajar por trabajo. ¿Cómo lo resumo? Calma, relajo y placer.
Después de ver los cuerpos samoanos tatuados, símbolos de una cultura milenaria intacta, ¿cómo no agregar Samoa a mi lista de sueños por cumplir?
Esta por Coromandel me sorprendió y encantó, pues me dio el privilegio de disfrutar paisajes que quitan el aliento.
Era un sueño que quería cumplir desde que tengo memoria. Es difícil de resumir, pero les contaré un poco de esta historia.
La experiencia de los tambores, el rito milenario, la adrenalina frente al fuego y el estar dentro de una caverna antiquísima fue mágica.
Hay momentos en los que uno quiere viajar para conocer y recorrer. Y otros… ¡para hacer absolutamente nada!
Los amigos árabes que he hecho en el último tiempo me provocaron ganas de conocer Arabia Saudita. Pero, por lo que averigüé, no es tan fácil entrar al país.