Viajar en una combi te enseña que la vida se disfruta paso a paso y que la felicidad es el camino mismo y no el destino.
Este es el relato de mi recorrido por Phnom Penh y cómo Mao, mi guía, cambió mi modo de ver las cosas.
Cuando veo algo relacionado con los Himalayas me imaginando conociendo los templos de Lhasa, caminando por Katmandú o descubriendo esas increíbles montañas.
En nuestro afán por coleccionar playas, nos fuimos de vacaciones a un lugar que hace rato nos estaba tentando: Bocas del Toro.
Vivimos un sinfín de aventuras en la selva y terminamos el recorrido en Kuélap. ¡El viaje tuvo un final inesperado! Por Catalina Bravo.
Los amigos árabes que he hecho en el último tiempo me provocaron ganas de conocer Arabia Saudita. Pero, por lo que averigüé, no es tan fácil entrar al país.
Lo que me encanta de los viajes es cómo a veces dan un vuelco inesperado. En Siem Reap vivimos esta hermosa experiencia.
Nos fuimos al Sudeste Asiático por tres meses para sumergirnos en templos, playas y naturaleza. Pero me quedé con un sueño pendiente: ir a Filipinas.
No tenía claro a dónde irme de viaje, así que dejé que el destino decidiera por mí. El perfecto resultado me permitió conocer Cliff of Moher, en Irlanda. Por Andrea Soto.
Se convirtió en mi nuevo sueño por cumplir, pues une las cosas que más amo en la vida: la comida, la culturas y los viajes.
Me fui con una grata sensación de pena y alegría de esta ciudad que me recibió con una mala impresión, pero que me cautivó.
Vanuatu logró conquistarme con sólo una fotografía y hoy estoy enamorada de todos los misterios que se esconden tras sus hermosos paisajes.