Gracias, Barcelona, por Gaudí y la cava
El artista más reconocido de Cataluña dejó sus obras repartidas por toda la capital de la comunidad, dejando impresionado hasta al más ignorante en cuanto a arte. Por eso y por muchas otras cosas hoy agradezco a Barcelona.
Barcelona es una ciudad impresionante. He escuchado a varias personas decir que es una mezcla perfecta entre lo antiguo y lo moderno, pero creo que esa descripción es bastante amplia y puede aplicarse a un centenar de ciudades en el mundo. Es por eso que me atreveré a cambiar ese cliché y diré que Barcelona es una mezcla perfecta entre Gaudí y la cava.
Lo que me gusta de Gaudí es que involuntariamente dejó su obra esparcida por toda la ciudad, donde se puede ver no sólo en majestuosas obras como la Sagrada Familia, sino que en detalles como los adoquines del Passeig de Gracia. A simple viste todo parece una gran locura, pero al conocer en detalle su obra me di cuenta de que cada una de las locuras plasmadas en cada edificio tiene una clarísima razón de ser y eso es lo que, a mi parecer, hace a Gaudí un maestro.
Antes de llegar a Barcelona era una total ignorante en relación al movimiento modernista de fines del siglo XIX y principios del XX en Europa. Si antes de este viaje me hubieran mostrado una foto de la Pedrera, no habría sabido qué decir u opinar al respecto, sólo que a simple vista se ve como un edificio bastante cómico.
Encontré un tour buenísimo y barato (12 euros) llamado Gaudí y el Modernismo, con el que recorrí a pie cada una de las obras de este y otros exponentes del modernismo. El guía nos explicó el porqué de cada edificio, en qué se inspiró el artista y detalles que me hicieron ver todos estos lugares de una manera distinta a como los habría visto con un tour convencional o sola por mi cuenta.
El recorrido comenzó en el Passeig de Gracia, donde están todas las casas y edificios emblemáticos, aunque para entrar a ellos entrar había que pagar aparte (una buena alternativa gratis es revisar los tour virtuales en YouTube). Terminamos en la Sagrada Familia, donde no fue necesario entrar, porque la descripción y la historia que nos contó el guía era tan detallada que me dejó totalmente satisfecha.
Aunque no estaba incluido en el tour, ese mismo día en la mañana visité el emblemático Park Güell diseñado por Gaudí. La entrada es gratis, pero para entrar a la zona donde están las obras del artista hay que pagar 8 euros y la fila es enorme. La solución: ver las obras desde la parte gratuita (se alcanzan a ver casi todas, principalmente la Plaza de la Naturaleza) y descargar una aplicación para el teléfono que incluye una audioguía que cuenta la historia del parque.
Gracias, Barcelona, por la cava
Probablemente fue lo que más consumí durante mi estadía en Barcelona. Sin exagerar, tomé cava literalmente todos los días durante un mes y medio. Importante es saber que se le llama cava a cualquier vino espumoso elaborado en la región de Cava, en Cataluña.
Siempre he sido una aficionada al espumante y el hecho de llegar a esta región y encontrarme con uno de buenísima calidad a 2,25 euros en el negocio de la esquina fue una total bendición.
Conocí a un chileno que me habló acerca de un lugar perfecto para mí. Fue así como llegué a un pequeño y rústico local en una callecita de la Barceloneta. A simple vista no tenía nombre, pero luego supe que se llama La Xampanyería o Can Paxano. El lugar me recordó a una bodega de barricas de vino, pues tiene poca luz y todo está hecho con madera tipo rústico. No hay mesas, sólo una gran barra de madera donde se vende todo. La copa de cava cuesta 1 euro –si se llega antes de las 5 PM la botella sale aproximadamente 3 euros– y se puede acompañar por la comida local más rica y barata que he probado en Barcelona. Tapas de jamón serrano o queso azul por 3 euros; butifarra y chistorra por 2 euros; jamón ibérico y quesos a destajo, ¡el paraíso!
Hay que llegar temprano, porque después de las 5 PM se llena y hay que hacer fila para entrar. La dirección es Carreer de la Reina Christina 7, metro Barceloneta. Lejos el lugar al que más recomiendo ir en Barcelona para comer y tomar.