Este pueblo nos sorprendió tanto que se convirtió en nuestro lugar favorito del viaje, un imperdible de la mágica Patagonia chilena.
Aunque es caro, este oasis del Sudeste Asiático tiene una belleza singular. Así logré disfrutar de sus bondades con el menor presupuesto posible.
Esta es mi experiencia en el evento donde puedes fumar durante todo el día sin que nadie pueda decirte nada, ni siquiera la policía.
En una 4×4 logramos conocer la famosa happy island más allá de los paisajes plasmados en sus publicidades turísticas.
¿Qué mejor que generar relaciones que superan barreras idiomáticas y culturales, amistades que visitar en todo el mundo?
Jamás me habría imaginado que un plato con frijoles nos llevaría a vivir una aventura como esta.
Hay lugares en el mundo por los que vale la pena sangrar y entregar un poco de uno para recibir muchísimo más.
En Pichasca cumplí uno de mis sueños más esperados: viajar por trabajo. ¿Cómo lo resumo? Calma, relajo y placer.
Siempre he leído mucho a García Márquez. Sin embargo, al conocer estos lugares confirmé que Colombia y Macondo son uno solo.
Tres horas de caminata, mucho calor y un par de errores culturales hicieron que los indios me dieran un regalo inolvidable.
En el colegio me enseñaron la cultura egipcia, pero jamás pensé que estaría frente a frente con las fotos de aquellos libros.
Después de ver los cuerpos samoanos tatuados, símbolos de una cultura milenaria intacta, ¿cómo no agregar Samoa a mi lista de sueños por cumplir?