Sólo así pude conocer sus cataratas, géiseres y glaciares, y presenciar el sol de medianoche, una experiencia que no olvidaré nunca.
No es necesario cruzar el océano para probar estas curiosidades, pues México permite vivir la experiencia.
Partí a Venezuela a visitar el salto Ángel, la caída de agua más alta del planeta, ubicada en el Parque Nacional Canaima.
Aunque se suele recorrer en tuk tuk, yo decidí visitar Angkor en bici, para vivir una experiencia única entre los templos.