Si hablamos de sueños viajeros, hay tantos dando vueltas por mi cabeza y mi corazón, que no podría elegir uno sólo. Con el tiempo se han ido transformando en ideas claras, en algo más que un simple deseo. Pero hay uno de estos viajes imaginarios que tengo entre ceja y ceja, y que me encantaría compartir.

Desde la primera vez que visité España sentí que estaba en casa. No sólo por el idioma y la cultura que nos une; realmente sentí que había vuelto al punto de partida. Fue como ir a esa gran casa antigua donde vivían nuestros abuelos, donde se criaron nuestros padres y dónde pasamos navidades inolvidables corriendo y jugando en el patio trasero.

Desde entonces sólo pienso en conocer lo que más pueda de este país. Para eso un roadtrip por España sería increíble.

España tiene más de 165.000 kilómetros de carretera y una superficie de 506.000 km², siendo un territorio diverso y basto. Nos gastaríamos la vida entera en descubrirlo por completo; por eso propongo cuatro rutas para empezar.

1. Ruta por la Costa Brava

La primera alternativa que se me viene a la cabeza es trazar una ruta por la Costa Brava. Dicen que para esto lo mejor es tomar la carretera de la costa que parte desde Tossa de Mar, donde se puede visitar su increíble castillo junto a la playa.

Un paraje que me parece imperdible es la playa de El Castell en Palamós, uno de los pocos lugares vírgenes que quedan en la Costa Brava. Puedes bañarte en sus aguas de cristal y explorar los pinares que la rodean. Además está muy cerca de los restos de un poblado ibérico. Playa y cultura, todo en uno.

Costa Brava

2. Ruta de Don Quijote

Una ruta que me parece mágica es la de Don Quijote. Empezando por el pueblo de Campo de Criptana, podemos visitar los lugares que el libro nos relata. Aquí se pueden ver los icónicos molinos de viento, de los que sólo queda una decena; el tiempo no perdona.

Campo de Criptana

3. Ruta a Cadaqués, Cataluña

Al poblado de Cadaqués podemos llegar atravesando una carretera de insinuadas curvas, que muestran en todo su esplendor los hermosos paisajes del Cabo de Creus. Situada al final del camino y mirando al mar, Cadaqués es el pueblo de Dalí y brilla por sí sólo. Un poblado mediterráneo que me quita el sueño con sus casitas blancas como perlas.

Cadaqués

4. Ruta a Galicia, tierras de ancestros

Si quiero dibujar algunas rutas para descubrir España, no podría dejar de lado a Galicia. Aunque la reservé para el final, es probable que fuera el viaje con más significado para mí. Son tierras que no conozco y por las que siento un amor inmenso, sólo por escuchar de ellas toda mi vida. Son las tierras que vieron nacer a los que han venido antes que yo a este mundo, alimentados por sus frutos y su mar maravilloso.

Viajar entre los poblados de Combarro y Pontevedra es un paseo por la historia, mientras que la playa de las Catedrales en Lugo sé que me dejará sin aliento. Por último, Santiago de Compostela, en la Coruña, es el lugar que no puedo saltarme; mi must.

Guardaré junto con mis mejores deseos esta pequeña lista, porque refleja mis ganas por descubrir nuevos rincones del viejo continente y de este país que me llama a miles de kilómetros de distancia.

Combarro