Un encuentro con tiburones en Caye Caulker

 

Nunca imaginé tener un tiburón en mis manos hasta que llegué a Caye Caulker, una de las islas más entretenidas de Belize. Es difícil relatar una experiencia como ésta, que me dejó llorando de emoción, así que lo único que puedo recomendar es vivirla. Por Isidora Longueria.

 

Todo partió en un bus escolar gringo. Y con ello me refiero a esos buses grandes y amarillos que salen en las películas.

Con el Jose, mi pololo, habíamos organizado unos meses antes un viaje que teníamos en mente hace mucho tiempo, incluso antes de conocernos. Los dos queríamos conocer México, porque considerábamos que tenía la mezcla perfecta: por un lado, playas alucinantes en las que se puede dormir una de esas siestas profundas y, por otro, una historia increíble con una población orgullosa de sus raíces. La idea era recorrer la península de Yucatán y lo que pudiéramos hacia el centro.

Investigando supimos que un amigo se había ido de luna de miel a México y Belize. México le había encantado; sus pirámides, comida y playas lo habían dejado loco. Pero lo que más lo impresionó fue Caye Caulker, una isla cercana a Ciudad de Belize, donde se encuentra la segunda barrera de coral más grande del mundo (después de la de Australia). Mi amigo había hecho snorkel y buceo en muchos lugares del mundo, pero nos dijo que Caye Caulker era uno de los mejores. En ese momento nos miramos con mi pololo y al mismo tiempo dijimos: “¡Tenemos que ir!”. Así fue como Belize se sumó a nuestro itinerario.

Cayos de Belice

No hay cayo en Belize que no sea hermoso

Fue así como, unos meses después, y tras haber recorrido algo de México, tomamos un viejo bus amarillo desde Chetumal para cruzar la frontera y llegar a Ciudad de Belize. Éramos los dos únicos extranjeros en el bus, por lo que todos nos miraban con curiosidad. Después de un viaje largo con una pana incluida, llegamos al terminal de Ciudad de Belize. Allí tomamos taxi que nos dejó en el muelle desde el que salen los barcos hacia las distintas islas de los alrededores.

Finalmente llegamos a Caye Caulker, tras un viaje en barco que nos permitió ver paisajes impresionantes. Nos encontramos con una pequeña isla en la mitad del mar Caribe, llena de colores y muy ondera. La gente caminaba despacio y sin apuro, y la buena vibra se respiraba en el aire. Nos instalamos y partimos a averiguar sobre los tours para hacer snorkel.

Nado con tiburones en Belice

Lista para nadar con tiburones

A primera hora del día siguiente nos subimos a un botecito con gente de todas partes del mundo para ver la reserva de la que tanto nos habían hablado. Avanzamos mar adentro hasta que el bote se detuvo. Entonces nos lanzamos al agua para pasar entre tres y cuatro horas viendo cosas increíbles: peces de todos tipos y colores, tortugas, tiburones y mantarrayas. La experiencia fue tan increíble que en la mitad del paseo me puse a llorar de la emoción. ¡No podía creer la suerte que tenía de haber llegado a ese lugar y ver todo lo que estaba viendo!

Nuestro guía era muy simpático y conocía Chile, así que le caí bien. Por eso me ofreció tomar un tiburón musola, muy común en ese lugar. Aunque siempre les he tenido terror, decidí que hora de superar el miedo. Al principio me morí de susto, pero después me relajé. Nunca en mi vida pensé que iba a tener un tiburón en mis manos.

Regresamos a nuestro hostal en calidad de bulto, pero más felices que nunca. El tour era mucho más de lo que nos habíamos imaginado, así que, después de descansar, fuimos a tomar una cerveza a uno de los locales de la calle principal de Cake Caulker para celebrar la increíble experiencia que esta isla nos permitió vivir.

Belice

El fondo marino de Belize es impresionante

Lugar:

Belice

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