Dicen que el que nace chicharra muere cantando. Y, al darle un vistazo a la vida de este viajero, este refrán adquiere más sentido que nunca.

Si de pequeño le hubiesen preguntado cómo se imaginaba a los 79 años, probablemente André Brugiroux ni siquiera habría soñado con estar en la lista de los viajeros más importantes del mundo. Sin embargo, una vida llena de aventuras lo tiene hoy encabezando este ranking elaborado por otro gran viajero (Jorge Sánchez), al que él denominó el “Hit Parade de los viajeros notables contemporáneos”.

Cuando en Faro conocimos a André, no dudamos en que debía ser el protagonista de nuestro Ciclo de Relatos Viajeros 2016. Es que acaso, ¿quién podría superar al viajero más importante del siglo XX? Los años que pasó recorriendo el mundo, las experiencias vividas y el objetivo buscado nos cautivaron de tal manera, que lo único que queremos es compartir algo de su historia de vida.

Este 19 de noviembre el viajero número uno del mundo nos acompañará en un nuevo #EncuentroFaro. Y, aunque no queremos adelantar su relato, sí queremos contarles quién es este hombre tan reconocido entre los viajeros del mundo.

Andre Brugiroux / Foto por Jeff Shea

Sesenta años de aventuras

Fue su madre quien lo contagió. Fue ella la que le transmitió la pasión por los viajes desde muy, muy pequeño. Y así, en una Francia apagada por la Segunda Guerra Mundial, los sueños de André se enfocaron en recorrer el mundo convencido de que la Tierra es un solo país y de que la paz no es una utopía.

A los 17 años, y dejando atrás los días de batalla, decidió salir a recorrer el mundo sin rumbo fijo. Sólo tenía 10 francos en la billetera, pero se las ingenió para juntar dinero y así cumplir su gran sueño. Entonces pasó algún tiempo trabajando en diferentes países de Europa, para luego pasar una temporada en el Congo y Canadá.

De esta forma, recién en 1967 dio el gran paso y comenzó a recorrer el mundo. Durante seis años viajó a dedo recorriendo 400 mil kilómetros y gastando sólo un dólar al día. El resultado: una vuelta al mundo y 135 países en su bitácora.

Sin embargo, esos siete años no estuvieron exentos de problemas y aventuras. Estuvo siete veces encarcelado, pues sospecharon que era guerrillero, espía e, incluso, secuestrador; lo deportaron dos veces, intentaron fusilarlo en reiteradas oportunidades, lo atacó un grupo de hienas en India y sobrevivió a una peligrosa enfermedad al intestino.

El resultado de 60 años de viajes

Pero no todo fue siempre escapar del peligro; también logró su cometido de compartir codo a codo con las comunidades locales de diferentes países. Así, vivió con los hippies de San Francisco, con monjes en Bangkok, con los famosos cortadores de cabezas de Borneo y con los traficantes de piedras preciosas de Sri Lanka.

Sólo en 1973 regresó a Francia, pero no logró acostumbrarse a llevar una vida sedentaria después de los 18 años que pasó de país en país. Por eso, desde entonces decidió seguir viajando, pero se prometió volver a su tierra natal cada cierto tiempo.

En 2011 logró la hazaña de conocer Sudán del Sud, el último país del mundo en ser creado, con lo cual pasó a encabezar la lista de los viajeros más viajeros. Y es que debemos asumir que conocer cada rincón del planeta no es un cometido fácil de cumplir.

Con 79 años en su cuerpo, André Brugiroux llega a nuestro país para narrar su historia por primera vez ante el público chileno. ¿Qué nos va a contar ese día? Eso sólo podremos saberlo el 19 de noviembre en el Ciclo de Relatos Viajeros.

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