Quizás no te pase cuando estás de vacaciones, pero cuando llevas varios meses fuera del país aparece la nostalgia y empiezas a darte cuenta de lo increíble que es Chile.  

Vivir en otro país es de las cosas más entretenidas que te pueden pasar. Pero a veces uno se pone nostálgico y empieza a echar de menos cosas que sólo tu país te puede dar.

Dejando de lado cosas obvias como la familia, por acá reunimos las siete cosas que echas de menos fuera de Chile, pero estamos seguros de que la lista es infinita. ¿Cuál se te ocurre a ti?

1. Playa al instante

Estés donde estés, siempre habrá una playa a dos horas de ti. ¿Cuántos países pueden decir lo mismo?

En un ratito estás en la playa

2. La once en familia

Desde el “¡está lista la once!” de tu mamá hasta la marraqueta con palta o la paila de huevo revuelto. Todo es parte de ese ritual que quizás no valorabas tanto cuando estabas en Chile.

Oncesita con marraquetas

3. La piscola

Un buen amigo lo sabe: no puede llegar a verte sin ese regalo de 40 grados. Juras que harás durar meses esa botella, pero después de dos piscolas no hay quién te lo recuerde.

¡Juro hacerla durar!

4. El clima

En general, Chile se comporta súper bien climáticamente, porque tiene de todo en su justa medida: en invierno hace frío y en verano hace calor, pero, salvo algunas excepciones, el termómetro no pasa de los 0 °C o de los 30 °C.

¡Tenemos un clima envidiable!

5. Tener el alimento preciso en el momento preciso

Sales del metro, está lloviendo a chuzos y ahí está el carrito de sopaipillas esperándote. Lo mismo pasa en verano, pero con los helados. Cuando estás en la micro a punto de derretirte, aparece ese bendito mora crema a sólo $200.

Salvador, ¿o no?

6. Asados por todo

Chile –y tal vez Argentina, por qué no decirlo– es el único país donde cualquier excusa es válida para hacer un asado. Si hay partido de fútbol o si el día está más caluroso que de costumbre… ¡lo que se te ocurra es motivo para tirar unas carnes a la parilla!

¿Juega Chile? ¡Asado!

7. Los chocolates

Estando en Chile, con suerte te comes dos de estos chocolates al año. Pero una vez que te vas a vivir lejos, darías la vida por un Super 8, una Negrita, un Trencito o un Sanhe Nuss.

Negrita