La historia de Laura nos demuestra que cualquier lucha es válida cuando de cumplir un sueño viajero se trata.

¿Recuerdas qué estabas haciendo a los 14 años? Lo más probable es que hayas estado en el colegio y que hubieses hecho uno que otro viaje con la familia para las vacaciones. Nada muy fuera de lo común. Y es por eso que esta historia te parecerá increíble.

La protagonista se llama Laura Dekker, una joven hija de padre holandés y madre alemana, ambos fanáticos de la navegación. Por eso, no resulta extraño que haya nacido, literalmente, arriba de una embarcación, mientras permanecían en el puerto neozelandés de Whangarei.

Durante sus primeros cuatro año no conoció otro estilo de vida que éste; pasaba de puerto en puerto conociendo más lugares que cualquier otro niño de su edad. Sin embargo, al parecer el sedentarismo le pasó la cuenta y, una vez ya establecidos en Holanda, Laura dio un importante aviso: se iría a recorrer el mundo en su yate. Pero lo haría sola, completamente sola.

Laura en medio de su travesía / Foto por ABC News

Inmediatamente la joven navegante consiguió el apoyo de sus padres, pero no así el de los tribunales holandeses, que se empeñaron en no permitir que Laura cumpliera su sueño por ser menor de edad. Así, y tras una larga e intensa lucha con las autoridades, la adolescente de entonces 14 años logró su cometido y se lanzó a la aventura.

Junto a su fiel compañero Guppy –un barco que recibió de regalo a los  diez años- Laura zarpó desde Gibraltar rumbo a las islas Canarias, la primera de las más de treinta paradas que realizó durante su desafiante reto. Eso sí, con varias condiciones que le puso el tribunal holandés, entre ellas permitir que su trayectoria fuera monitoreada por expertos en el tema y, además, con el compromiso de estudiar durante el período que durara su aventura.

Después de un año y medio Laura atracó en la isla caribeña de Sint Maarten, convirtiéndose en la navegante más joven del mundo en atreverse a realizar una hazaña de esta magnitud. Durante todo el tiempo, y hasta el día de hoy, ha ido documentando su experiencia en un blog, y actualmente vive en Nueva Zelanda. Sin embargo, jamás ha dejado de lado su gran pasión y continúa navegando por los mares del mundo.

Hoy puedes leer su aventura completa en su libro «One Girl One Dream», disponible en Amazon.

Presentando su libro / Foto por Laura Dekker